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ámsterdam del alma

lección de integración I


Te lo comes con cebolla,
te lo comes sin cebolla,
te lo metes en un bollo,
(en un bollito de leche)
te lo cojes de la cola
mirando hacia la bandera

bajo sol cegador con cofia puesta
mientras lo enguyes,
ídem con zuecos


(siempre en la calle estas dos opciones),

te acostumbras a sus inocentes espinas
(y que se abstengan ingerifóbicos),

invitas a amigo turista en puente próximo.



Y siempre crudito.
El arenque... ay qué rico!

4 comentarios

la_rayuela -

Al final el destino del pez grande y el chico fue el mismo. Los dos acabaron en escabeche...

Un saludo,

Ararat -

Tiene buen aspecto pero para los que no nos gusta el pescado crudo...
Un saludo.

pedro -

oye, te le comiste la cola al bicho?

vecino -

La vida se ve mejor después de un arenque. Dicen que tiene propiedades medicinales. Todo tiene propiedades medicinales! Bueno, son muy ricos. Buenos contra el cáncer.
Dónde comerlos es algo que los holandeses investigan concienzudamente y ponen nota. Yo los como a veces en lo de Trudi, el boliche de arenque del mercado de las pulgas, frente a los negros de las telas psicodélicas cristianas musulmánicas. A 2 euros, con cebolla. El tenderete es en realidad una caravana antiquísima, despachurrá a la vera del sendero. Tja, lumpen romántico. Y en el puente de Prinsengracht con Utrechtsestraat, pero el dependiente me trae tostado porque creo que cree que soy ratero y que me bajo del tranvía 4 comer arenques después de "trabajar". Será animal?