sobre marcas y afuerinos
Movidita han tenido la semana los cafres xenófobos. Quemaron en Rótterdam una mezquita, que quedó totalmente destruida. Y en el centro de acogida de refugiados de Rheden hicieron tanto de lo mismo.
Desde que el ministro del interior llamara a la guerra contra el islam, a los pocos días de que degollasen a Theo van Gogh, la policía ha contabilizado 164 incidentes; 44 de ellos desde finales de noviembre. De estos 44, 31 contra mezquitas.
Recientemente se ha creado un grupo antiapartheid, constituido por marroquíes y turcos (+). Lógico. Raro que aparezca tan tarde. Las leyes de inmigración e integración están institucionalizando la discriminación a ciertos grupos. Los derechos no son los mismos para todos. Un moro no podrá casarse con quién decida, por ejemplo, ni reunir a su familia libremente, y deberá, aun teniendo pasaporte holandés, hacer méritos especiales para no perder los derechos que le corresponden; y sus familiares en Marruecos deberán en Marruecos- aprender a hablar holandés, si acaso quieren reunirse con él aquí. Ello sin contar la agobiante campaña ideológica en la que colaboran mano a mano partidos de gobierno y medios de comunicación. Este grupo, Genoeg is Genoeg [Basta Ya], quiere llamar la atención sobre este gravísimo problema. A este estado de cosas la población se ha acostumbrado como a la lluvia de abril. Mientras la injusticia afecte sólo a los moros, andará la gente caliente y a carcajadas. Como ocurrió con los judíos. Y este paralelismo es precisamente el que destacan totems del liberalismo y del democraticismo como Ed van Thijn [otra de las constantes de esta bitácora].
El 17 de septiembre Genoeg is Genoeg convoca a una manifestación contra la política de extranjería.
Me he encontrado por la calle con turistas del sur de Europa (de la zona del ajo, como nos llamó el otro día un periodista), con sudaderas marca Lonsdale; y no tenían pinta de ser xenófobos (con perdón). Me consta que no todos lo sabéis, mis queridos: aquí (y en Alemania, y en Bélgica) la usan los extrema-derecha. Sobre los muros de la mezquita incendiada, los cafres escribieron la marca registrada, Lonsdale, junto a otras pintadas: Theo R.I.P. y No queremos mezquitas en el barrio.
Desde que el ministro del interior llamara a la guerra contra el islam, a los pocos días de que degollasen a Theo van Gogh, la policía ha contabilizado 164 incidentes; 44 de ellos desde finales de noviembre. De estos 44, 31 contra mezquitas.
Recientemente se ha creado un grupo antiapartheid, constituido por marroquíes y turcos (+). Lógico. Raro que aparezca tan tarde. Las leyes de inmigración e integración están institucionalizando la discriminación a ciertos grupos. Los derechos no son los mismos para todos. Un moro no podrá casarse con quién decida, por ejemplo, ni reunir a su familia libremente, y deberá, aun teniendo pasaporte holandés, hacer méritos especiales para no perder los derechos que le corresponden; y sus familiares en Marruecos deberán en Marruecos- aprender a hablar holandés, si acaso quieren reunirse con él aquí. Ello sin contar la agobiante campaña ideológica en la que colaboran mano a mano partidos de gobierno y medios de comunicación. Este grupo, Genoeg is Genoeg [Basta Ya], quiere llamar la atención sobre este gravísimo problema. A este estado de cosas la población se ha acostumbrado como a la lluvia de abril. Mientras la injusticia afecte sólo a los moros, andará la gente caliente y a carcajadas. Como ocurrió con los judíos. Y este paralelismo es precisamente el que destacan totems del liberalismo y del democraticismo como Ed van Thijn [otra de las constantes de esta bitácora].
El 17 de septiembre Genoeg is Genoeg convoca a una manifestación contra la política de extranjería.
Me he encontrado por la calle con turistas del sur de Europa (de la zona del ajo, como nos llamó el otro día un periodista), con sudaderas marca Lonsdale; y no tenían pinta de ser xenófobos (con perdón). Me consta que no todos lo sabéis, mis queridos: aquí (y en Alemania, y en Bélgica) la usan los extrema-derecha. Sobre los muros de la mezquita incendiada, los cafres escribieron la marca registrada, Lonsdale, junto a otras pintadas: Theo R.I.P. y No queremos mezquitas en el barrio.
5 comentarios
pepa -
pepa -
pepa -
Cómo podrán tragar con tales ideas y políticas? Será que no se enteran de lo que se está cociendo? Será que en realidad no les preocupa? Yo sólo he oído quejas de 1 o 2 intelectuales, de algunos moros y de judíos, tal vez los más conscientes de lo que se avecina.
Nere -
Lo que comentas y denuncias es realmente preocupante. En los últimos años se están disparando los grupos neonazis, la ultraderecha, cada vez se hace más fuerte. A pesar de lo que muchos de nosotros podría ingenuamente pensar, éstos grupos estan altamente organizados y reciben apoyo económico de muchos países importantes, fundamentalmente desde América. El año pasado leí un artículo titulado "el nazismo que viene" y los datos que recogía eran escalofriantes. Decía que en España estaban tomando cuerpo político camuflados dentro de la izquierda, porque contemplaban esta como la única forma posible ahora mismo de acceder al poder.
Si estuviese allí me uniría a la manifestación. Gracias por mantenernos al día Pepa, UN BESO
Rob. -